Todos hemos oído muy a lo lejos un concierto de música, una tormenta... pero ¿sólo se transmite el sonido por el aire?
Fieles a nuestro estilo os propongo un experimento para averiguarlo...
Necesitamos el siguiente material:
1. Un reloj de muelle
2. Una mesa
¿Cómo lo hacemos?
Paso 1:
Acerca el reloj al oído y escucha su repiqueteo, después aléjalo gradualmente hasta que dejes de oírlo; mide esta distancia.
Paso 2:
Pon el reloj en la mesa y apoya tu oreja sobre la mesa a la misma distancia medida antes.
¿Qué ocurre?
El tic-tac del reloj es percibido claramente por el oído.
Porque...
... los sólidos transmiten los sonidos mejor que el aire. Los sonidos viajan fácilmente también a través de ladrillos y cristales; por eso son percibidos asimismo a través de las paredes y ventanas.
Los sonidos en el agua
Los sonidos bajo el agua parecen más fuertes. Cuando en el mar nadas de espaldas y tus oídos quedan bajo la superficie del agua, sientes el ruido de tu respiración amplificado; si golpeas dos piedras en el agua, advertirás que el ruido te llega con mucha fuerza. En el agua la velocidad del sonido es casi cinco veces superior a la del aire.
Como ves el experimento es muy sencillo, cuando lo hagas cuéntame con que cara se han quedado los que lo han visto y si se te ocurre otra forma de demostrarlo compártela con nosotros.
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